La relativa calma antes de la tormenta en Sudán, donde no hay solución inmediata.

Escrito por – Elijah J. Magnier:

La batalla en curso entre los dos generales que se disputan el poder en Sudán se ha suspendido temporalmente para permitir la evacuación de extranjeros y civiles a zonas más seguras. El conflicto enfrenta principalmente al jefe del ejército y gobernante de facto, Abd al-Fattah al-Burhan, y a su adjunto, el comandante de las Fuerzas de Apoyo Rápido, Muhammad Hamdan Dagalo, también conocido como “Hemedti”. Ambos generales tienen amplios contactos regionales e internacionales, y su lucha por el control ha suscitado gran interés y preocupación en el extranjero.

El alto el fuego ha puesto en pausa los combates, permitiendo a los combatientes reposicionarse y planificar la siguiente fase si no se ofrece una solución seria para poner fin a la escalada. Sin embargo, la cuestión crítica sigue siendo qué país extranjero apoyará la guerra. Con todas las perspectivas de solución bloqueadas, es probable que la intensidad del conflicto aumente, agravando la catástrofe social en la que se ha sumido el país.

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