
Escrito por – Elijah J. Magnier:
En un cambio significativo de sus tácticas tradicionales, Israel ha modificado su enfoque de las invasiones terrestres. En lugar de su estrategia habitual, Israel ha lanzado ahora una serie de operaciones terrestres contra la Franja de Gaza, tanto por tierra como por mar. Un bombardeo de una intensidad sin precedentes ha precedido a este cambio. A pesar de los llamamientos urgentes de 120 naciones en el Consejo de Seguridad para un alto el fuego inmediato, Israel ha mantenido su postura agresiva.
Sin embargo, las ganancias militares para Israel de estas acciones parecen mínimas. El principal resultado ha sido la devastación generalizada, con más de 7.500 civiles muertos, entre ellos la asombrosa cifra de 4.800 mujeres y niños. Sin embargo, en medio de este caos, a la resistencia palestina no le ha pillado desprevenida. Fuentes del “Eje de la Resistencia” indican que los palestinos habían previsto y preparado el ataque israelí.
Altos cargos del Eje de la Resistencia, que operan desde los Centros de Mando Conjunto, han comentado el reciente bombardeo israelí del norte de Gaza. Declararon: “Los grandes daños causados por los intensos ataques aéreos de Israel en el norte de la Franja de Gaza sirven ante todo como un obstáculo importante para el avance de los vehículos militares y las brigadas mecanizadas israelíes desplegados dentro de las fronteras de Gaza”.
La fuente continuó diciendo que “Israel llevó a cabo ataques aéreos contra varias zonas residenciales durante las horas nocturnas. Aunque las zonas cercanas a la Franja de Gaza ya habían sido evacuadas de sus residentes, Israel sigue atacándolas. Esto se debe en gran medida a la preocupación por los intrincados sistemas de túneles y fortificaciones construidos por la resistencia en el interior de la ciudad”. La destrucción masiva causada por la artillería y la aviación israelíes ha proporcionado inadvertidamente a la resistencia palestina posiciones fortificadas y trincheras que ni siquiera podían imaginar, lo que les permite tender emboscadas y enfrentarse al enemigo.
Israel desplegó en las primeras incursiones tres divisiones, el equivalente a nueve brigadas o unos 30.000 soldados, en el teatro de operaciones de distintos frentes del norte. Dados los extensos bombardeos y la destrucción infligida por el propio Israel, junto con los cráteres dejados por los bombardeos masivos de artillería y los bombardeos aéreos, estas divisiones mecanizadas tendrán dificultades para realizar avances significativos. Como resultado, cualquier avance será penosamente lento debido a la enorme cantidad de escombros. Esto obligará a Israel a recurrir a unidades de infantería para el combate directo con la resistencia. Este enfrentamiento provocará inevitablemente un número considerable de bajas para las fuerzas israelíes que avanzan, algo que el ejército israelí desea evitar.
La resistencia palestina ha movilizado a miles de trabajadores para construir nuevos túneles bajo los escombros. Estos túneles tienen un doble propósito: distraer al enemigo y contrarrestar cualquier avance de la infantería. Las ruinas de los edificios destruidos se están reutilizando como mortíferos puntos de emboscada. Dado el gran daño infligido por Israel, a la resistencia palestina no le queda ninguna infraestructura civil o industrial que proteger sobre el terreno. Sin darse cuenta, esto les ha dado una ventaja, permitiéndoles convertir estas áreas devastadas en zonas operativas destinadas a agotar los recursos y el equipamiento israelíes. La resistencia puede ahora moverse con mayor agilidad y atacar fácilmente a las unidades móviles israelíes.
La fuente añadió: “En respuesta a la drástica transformación urbana causada por la destrucción, la resistencia palestina ha innovado sus estrategias militares. Han creado nuevas unidades y células de combatientes de la resistencia que operan de forma autónoma bajo una estructura de mando militar descentralizada. Estas unidades utilizan comunicaciones seguras y encriptadas para prepararse para enfrentarse a los invasores. Los israelíes se enfrentarán a una forma de lucha urbana que nunca antes habían visto.
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